Aunque tragarse un piercing no es muy común, a veces puede suceder que un mal ajuste en la joya pueda ocasionar este accidente. ¿Es grave? Casi nunca, pero en todo caso, es importante que sigas las siguientes recomendaciones:

Actúa inmediatamente

Tan pronto notes que has perdido la joya, debes evitar sacar la barra, o de lo contrario corres el riesgo de que cicatrice la perforación y tengas que volver a hacerla.

En ese caso lo más recomendable es utilizar algo de goma de mascar sin azúcar y de un sabor no tan fuerte para evitar irritaciones, esto ayudará a que la barra se mantenga en su sitio.

Lo que puede suceder

Si solamente se ha perdido la joya y esta tiene un tamaño menor, entonces no habrá mayor inconveniente y al final pasará por todo el tracto digestivo, aunque en caso de ser grande puede causar alguna obstrucción.

Por otro lado, si te has tragado el piercing incluyendo la barra, esta también podría traer complicaciones, aunque hay pocos casos reportados.

Sin embargo, hay algo muy importante a tener en cuenta y es que podrían causarse perforaciones internas. Cuando eso sucede la primera reacción del organismo es un aumento en la temperatura, así que debes estar atento en caso de que eso suceda.

Ahora bien, si quieres estar completamente tranquilo, entonces la mejor opción es ir directo al médico para que te tome una radiografía. Allí se podrá ubicar la joya y dependiendo de la posición el médico evaluará lo que pueda ocurrir, cuánto tiempo tardará en salir e incluso recomendarte algún laxante para acelerar el proceso.