El Tatuaje Convertido en Arte

Aunque durante mucho tiempo fueron una señal de castigo, hoy en día el tatuaje ha venido ganando una reputación importante como arte, pues integra muchos aspectos como el diseño, trazado, líneas, conceptos y un significado muy especial, tanto para el artista que ejecuta la obra, como para el cliente.
La evolución del tatuaje como arte
Pero quizá lo que más evidencia todo esto ha sido el mismo papel que ha jugado el tatuaje a lo largo de la historia. Por ejemplo, en las culturas más antiguas, los indígenas se hacían tatuajes, perforaciones y muchas otras modificaciones corporales como una forma de expresar su adoración a un dios en particular, aunque casi siempre estaban reservadas para los miembros de mayor status.
De una manera similar ocurrió hace varios siglos en Japón, donde tanto emperadores como reos compartían el uso del tatuaje, pero con al diferencia de que los primeros tenían diseños con líneas mucho más finas, mientras que a los segundos se les imprimía un diseño vergonzoso.
Luego vendría el uso para los miembros de la marina y así sucesivamente hasta llegar a las calles, que sería durante los 90’s cuando empezó la transición a nivel cultural, pues anteriormente servía para formar todo tipo de prejuicios acerca de la condición social del individuo, pues se le juzgaba como drogadicto o ladrón.
Hoy en día el tatuaje es considerado un arte y son muchas las personas que buscan un artista, sin importar la edad, género o los ingresos, simplemente porque desean tener en su piel un diseño que les de identidad o para conservar un recuerdo de algún ser querido, tal y como lo sería un retrato o pintura.