Todo sobre el piercing Medusa
Los piercings en la zona de la boca aportan diversas personalidades dependiendo del lugar en el cual se coloquen, y por supuesto, de la joya. En ocasiones puede que la imagen de una persona con un piercing en la zona la haga parecer sensual (sobre todo si la boca es carnosa), rebelde, de carácter fuerte, inconformista, etcétera.
¿Qué es el piercing Medusa?
El piercing Medusa se trata de una perforación en el labio superior que se pone específicamente en el surco nasolabial, justo debajo de la nariz (donde está el huequito). Esta perforación precisa del doble de atención, dado que al ser bucal y labial, hay que tratar cada uno de los extremos de la perforación realizada por separado.
Consejos para evitar las infecciones
Cuando decidas a hacerte un piercing Medusa tendrás que saber anteriormente que esta perforación afectará tu capacidad para comer y para beber durante al menos dos o tres semanas, dado que necesita cicatrizarse correctamente. Además, mientras la herida esté sanándose deberás sí o sí evitar el cigarrillo y las bebidas alcohólicas, sobre todo la cerveza, ya que el contenido de levadura que posee irrita los piercings.
Por otro lado, es fundamental que mantengas la zona lo más limpia posible, ayudándote con un enjuague bucal antiséptico todos los días para evitar la formación de bacterias.
Período de cicatrización
Generalmente, la cicatrización externa de la perforación suele ser de hasta dos semanas, mientras que la cicatrización interna puede llegar a demorar hasta seis meses. Por tanto, es imprescindible que tengas siempre libre la zona de residuos de alimentos para que la cicatrización sea mucho más rápida.