Lo que debes saber sobre los implantes subdérmicos
Los implantes subdérmicos son una de las tendencias que más acogida han tenido, pues además de célebres modificaciones corporales como las del Hombre Lagarto, programas y documentales como ‘Tabú’ también han contribuido a difundirla.
¿Cómo funciona?
El procedimiento es bastante simple en teoría. Se trata de hacer un pequeño corte en la piel, formando una especie de pequeño saco, donde posteriormente se insertarán los implantes de acero inoxidable o silicona.
¿Qué formas pueden tener los implantes subdérmicos?
Aunque inicialmente se utilizaban cierto tipo de esferas para dar origen a una especie de cuernos en la cabeza, hoy en día existe una amplia gama de formas que pueden ser tubos, estrellas, barras, anillos, etc.
Sin embargo, aquí no termina todo, pues se pueden combinar estos elementos de diferentes maneras, logrando un efecto de escamas, protuberancias y demás, que acompañados por un buen tatuaje son muy interesantes.
¿Qué riesgos hay?
Cómo cualquier otra modificación corporal, el organismo siempre será quien dictamine si aprueba o rechaza la inserción de estos implantes. La gran mayoría asimila muy bien aquellos que son de acero inoxidable o silicona, pero cuando se trata de materiales de tipo orgánico suelen presentarse inconvenientes, pues estos tienden a descomponerse.
Adicionalmente, al tratarse de una herida, exige cuidados especiales para evitar que se infecte, además de la utilización de vendajes para evitar que los implantes subdérmicos se muevan más de la cuenta en las noches o ante un movimiento brusco mientras logran estabilizarse.
Por lo demás, cada día se popularizan más y más, por lo que las técnicas para incrustarlos también se han ido perfeccionando.