Tatuarse han llegado a otro nivel, al punto que poder tatuarse los ojos es una realidad desde hace ya algunos años, pero si bien es cierto que es una de las modas más llamativas y sorprendentes, también es cierto que someterse a este tipo de trabajo es arriesgarse a perder la vista. El tatuaje ocular no te da garantía de que el resultado será el esperado en todos los casos.

Cada vez son más las personas que se animan a tatuarse en los lugares más sensibles del cuerpo, pero definitivamente los ojos podría ser la parte más peligrosa por lo delicado que es este órgano y una vez afectado los daños pueden ser irreparables. hay que tomar en cuenta que al realizar  este proceso debes hacerlo bajo tú propio riesgo en caso de alguna lesión.

Procedimiento

La técnica del tatuaje ocular consiste en inyectar un pigmento en el ojo, de forma que el líquido quede por debajo de la membrana conjuntiva, la cual es una capa transparente que cubre al globo ocular y de esta forma se va aplicando la coloración que se desea obtener. si se realiza una mala práctica del procedimiento podría causar infección y o ceguera.

Los efectos secundarios de un tatuaje ocular podrían aparecer con el pasar del tiempo, quizá al principio todo salga bien, pero el globo ocular ha sido alterado y esto puede ocasionar mal funcionamiento de la mucosa o membrana conjuntiva, la lubricación en los ojos puede verse altamente afectada, por lo que afectaría la transparencia de la membrana y puede ocasionar ceguera temporal o permanente.