Tres tips sobre la tinta para tatuajes
Algo de lo más fundamental en la realización de un tatuaje es la tinta. Se trata de un aspecto que resultará vital para un buen trabajo desde el punto de vista tanto artístico como visual. De más está decir que la calidad de la materia prima será vital en la calidad que se mostrará en la piel, como también evitar sorpresas a futuro. Por todo ello repasamos a continuación cómo es la tinta para tatuajes y sus componentes en general.
En la actualidad, los fabricantes de tintas y pigmentos no se encuentran obligados a revelar el contenido. Hoy en día, aquellos profesionales que mezclan sus propias tintas de pigmentos secos conocen más sobre la composición de sus tintas que aquellas industrializadas.
Las tintas para tatuajes son, desde el punto de vista técnico, pigmentos que se suspenden en una solución portadora. Estos pigmentos, que pueden ser tanto de origen vegetal como de sales metálicas, le dan el color al tatuaje.
La tinta para tatuajes
Hay que partir de la base que diferentes tintas posibilitarán que un mismo tatuaje se pueda observar de manera diferente, ya sea desde lo opaco, la brillantez, lo nítido o borroso. Además de poder llegar a tener algún efecto sobre nuestro cuerpo. Dependiendo de la propia tinta, una persona puede llegar a tener reacciones alérgicas. Sin embargo, es misión de un buen tatuador estar atento a las contraindicaciones de los pigmentos.
La gran mayoría de las tintas se realizan a base de pigmentos derivados de metales. Esto obliga a que el profesional esté en conocimiento de si la persona tiene algún tipo de alergia cutánea. Tengamos también en cuenta que los colores suelen estar formados por distintos compuestos. Ante ello vamos a estudiar algunos de los ingredientes que componen cada tinta de tatuajes.
Composición de las tintas
Estudiaremos cada color dentro de los más utilizados, atendiendo cada uno de manera particular pero teniendo en cuenta que no todas las personas reaccionan igual, y que esta guía es más a tono informativo. Siempre es bueno consultar con el médico y el tatuador de confianza sobre las tintas para tatuajes a utilizar, así como las reacciones adversas, sobre todo para aquellos primerizos en el mundo del tattoo.
- Tinta roja: Suele ser el color que genera más reacciones alérgicas, en gran parte por tener una base de mercurio o, como se conoce la tinta, sulfuro de mercurio. En caso de tener alguna reacción, las mismas aparecen muchos años después de realizado el tatuaje. Muchos tatuadores usan la tinta carmín como alternativa, ya que se confecciona a base de corazas de insectos.
- Tinta negra: Realizada a base de carbón, es muy extraño que provoque reacciones alérgicas. Sin derivados de metales, únicamente el fenol puede tener reacciones en algunas personas.
- Tinta azul: Hecha a base de sales de cobalto, puede tener alguna contraindicación en personas con hipersensibilidad.
- Tinta amarilla: Compuesta por cadmio y sulfito de cadmio, son los componentes que puedan generar alguna reacción.
- Tinta blanca: Esta tinta se compone de titanio u óxido de zinc, suelen ser alérgicas para algunas personas.
- Tinta violeta y púrpura: Pese a ser derivadas del magnesio, que tiene alguna contraindicación, no es algo común que suceda.
Tatuaje y toxicidad
Pese a los temores de toxicidad, que muchas veces levantan hasta estudios de muchos organismos de salud, la práctica del tattoo viene con determinados cuidados, tanto previos como posteriores a la realización de un tatuaje. Por supuesto que hay personas sensibles a determinados productos, por lo que es vital el conocimiento tanto de uno como de su propio tatuador.
La venta de estos tintas para tatuajes está regulada y garantizada su utilización, posibilitando la realización de un tatuaje sobre nuestra piel con total seguridad y tranquilidad, al ser algo que nos acompañara el resto de nuestras vidas.