Si no estás contento con tu figura y entre tus planes está el verte más flaco, pero al mismo tiempo deseas hacerte un tatuaje, es muy importante que tomes en cuenta ciertos aspectos.

Primero debes preguntar al  tatuado, ¿cómo cambiaría tu tatuaje después de adelgazar drásticamente?. Debes tener muy en cuenta, que los cambios en tu cuerpo afectarán de algún modo los diseños que te hayas hecho en la piel.

La zona del cuerpo es un punto clave

Bajar o subir de peso, envejecer, quedar embarazada, entre otras, como es lógico dañarán en cierta forma la apariencia del tatuaje. Si en cambio estos grabados están hechos en algunas zonas como los tobillos, pies, cuello, muñecas y manos, los cambios no serán muy evidentes.

Si eres hombre y estas en esa transición de tu cuerpo, probablemente notes que la tinta en los brazos o estómago ha sido alterada muy drásticamente. En cambio las mujeres lo notan, cuando éstos están ubicados en la zona de los muslos, caderas o vientre.

Mientras más lento mejor

Si bajas de peso de manera drástica, probablemente el tatuaje, al igual que tu cuerpo sufrirá cambios importantes. Es preferible que optes por las dietas saludables, que te permiten rebajar de manera gradual de esa manera protegerás tu dibujo y también la piel, evitando que salgan estrías y flacidez.

Los tatuajes grandes tienden a distorsionarse menos con estos cambios y en caso que esto suceda, entonces podrás añadir otros detalles que lo hagan lucir tan fabuloso como siempre. Pero si aún te quedan dudas, anda a un estudio y pregunta a tu tatuador ¿cómo cambiaría tu tatuaje después de adelgazar drásticamente?.