Significado de los tatuajes de Katy Perry
Los detalles que suelen hacerse los famosos en sus cuerpos forman parte de la cultura artística y musical. La razón por la cual cantantes como Kety Perry se realizan tatuajes son varias, una de ellas es expresar más allá de sus canciones los sentimientos que mantienen ocultos por la música o por ellos mismos otra es su historia personal y los sacrificios que han realizado para alcanzar la fama.
Los tatuajes de Katy Perry suelen ser motivo de tendencia a sus fans, muchos de ellos han optado por realizarse diseños similares a los que lleva la cantante. Como buena estrella extravagante sabe dar en el punto justo a la hora de tatuarse, eligiendo siempre diseños vanguardistas y llenos de personalidad.
Comienzos cristianos
Perry posee en su muñeca la palabra “Jesús” y está realizada en honor a sus pasos por el cristianismo cuando cantaba este género musical antes de ser vista por la industria musical y lanzada al estrellato.
En su otra muñeca se deja ver una pequeña Flor de Loto y se especula que Perry está tratando de recomenzar su vida en el cristianismo con este diseño que simboliza el renacer de algo nuevo o de algo que quiere florecer nuevamente.
Éxito frutal
Los éxitos musicales I Kissed a Girl y Hot N Cold del primer álbum One Of The Boys le dieron un salto a la fama a Perry, creando las raíces fuertes para mantenerse como una de las mejores cantantes de pop del momento, y como durante la gira del álbum los escenarios fueron decorados con frutas inflables gigantes, Katy decidió entonces rendir homenaje a su éxito con una sonriente cereza en su tobillo.
Para su segundo álbum Teenage Dream, la cantante obtuvo un éxito merecido como artista y ayudo a Katy a sentirse aun más segura sobre el escenario como una de las figuras más exitosa de la música pop. Y para simbolizar este segundo éxito se tatuó en su otro tobillo una menta sonriente.
Honor al amor
Entre los tatuajes de Katy Perry se encuentra la palabra “Dejate llevar” realizada junto a quien fue su esposo, el comediante británico Rusell Brand. Esta frase en la parte interior del brazo es el refuerzo de la unión que ambos sentían para el momento de su matrimonio. Un año más tarde se ambos se divorciaron pero conservan sus diseños tatuados como un recuerdo espiritual realizado en la India donde se casaron.