Cada vez es más común encontrar personas con perforaciones dilatadas, especialmente en las orejas, sin embargo, dejando de lado toda la discusión sobre si tener túneles se ve bien o mal, es importante conocer las formas de expandir o dilatar una perforación que existen.

Dilatar una perforación no es cosa simple ni de un solo día, si no se hace con la diferencia de tiempo suficiente entre los diferentes diámetros, la piel podría desgarrarse e infectarse por completo, lo que sería realmente negativo y doloroso.

Expansores y plugs

Lo primero es que se debe tener una perforación previa en la zona, preferiblemente de unos 2 mm de diámetro y centrada en el sitio correspondiente, y una vez que esta perforación esté sanada, se procederá a realizar la dilatación con algún expansor o plug.

Hay expansores de diversas formas, los más comunes son los espirales y los cuernos, ambos cuentan con diferentes milímetros o diámetros para poder ir realizando la expansión poco a poco y evitar los riesgos; estos cuentan con un extremo delgado y se van ensanchando hasta alcanzar cierta medida, con lo que se puede ir pasando de una medida a otra en pocos días.

Los plugs o túneles, por su parte, ya tienen un tamaño definido y sirven para mantener la expansión en el tamaño que se desea.

Recomendaciones y cuidados

Cuando se buscan las formas de expandir una perforación siempre es recomendable utilizar materiales de calidad, lubricar bien la perforación antes de introducir un expansor de mayor diámetro, mantener el área desinfectada y límpia, hacerlo con calma y, tener en cuenta que hasta cuando se dilata una perforación, en el lóbulo de la oreja, hasta los 8 mm, aún puede volver a cerrarse, luego de eso ya no hay marcha atrás y puede afectar el futuro profesional.